jueves, 25 de septiembre de 2014
viernes, 12 de septiembre de 2014
Invitación del Taller de Italiano UG a una clase abierta
Una
noche un anciano Cherokee le contó a su nieto sobre una batalla que se
mantiene dentro de la gente. Dijo, “Hijo, la batalla es entre dos lobos
en el interior de todos nosotros.
Uno
es el Mal: la ira, la envidia, los celos, la presunción, el dolor, el
odio, la avaricia, la arrogancia, la autocompasión, el resentimiento, el
sentimiento de inferioridad, las mentiras, el orgullo, la lujuria, la
superioridad y el ego.
El
otro es el Bien. Es el gozo, la paz, el amor, la esperanza, la
serenidad, la humildad, la bondad, la benevolencia, la empatía, la
generosidad, la verdad, la compasión y la fe.”
El
nieto lo pensó un momento y luego le preguntó a su abuelo: ¿Cuál lobo
gana? El anciano Cherokee simplemente contestó, “El que tú alimentes.”
Nuestro planeta Tierra, con sus características, hace posible el desarrollo de la vida:
Es evidente que el hombre, como parte de la Creación, ha determinado un vínculo destructivo con la naturaleza:“El
crecimiento económico, material, cuantitativo de las poblaciones
humanas tiene un costo para la naturaleza y para cada uno de nosotros:
las actividades del Hombre han superado los límites de tolerancia de
nuestro planeta.” (http://www.wwf.it/)
Pero, como parte del problema, reside en el mismo hombre la posibilidad de revertir esta degradación del medioambiente: “Esta
cuota de Naturaleza (la que recibimos como un regalo al momento de
nacer) se empobrece cada vez más. Si queremos un futuro debemos
custodiarla, cuidarla; (es decir) reducir nuestro peso sobre los
recursos naturales, aligerar nuestra huella sobre el planeta”. (http://www.wwf.it/).
El
hombre, además, no sólo se muestra hostil hacia animales, plantas y
recursos naturales, sino también hacia sus semejantes.: discriminación,
guerras, sometimiento son parte de este fenómeno por el cual un
individuo ataca y pone en peligro a sujetos de su propia especie. Cuál
es el origen de esta oscura actitud hacia la Naturaleza y hacia los
semejantes? Èsta podría ser una buena respuesta: “Quizás muchos de
estos problemas surjan por el sentimiento de superioridad del ser
humano. Tal vez encontremos una solución el día en que no sólo dejemos
de sentirnos ´humillados´ por ser parte de la Naturaleza tanto como una
planta o un hurón, sino cuando incluso estemos orgullosos de lo que
realmente somos: animales (seres) muy inteligentes y con conciencia” (Ciencias naturales, pag. 188)
"Nosotros y la Tierra: los hombres", una invitaciòn a mirar el lobo bueno y el lobo malo que habitan en nosotros.
miércoles, 3 de septiembre de 2014
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