Primera jornada del Encuentro de Formación y Reflexión en el PEAM

Comenzaron las Jornadas de Formación y Reflexión “Mayores protagonizando educación y proyectos”, organizadas por el Programa Educativo de Adultos Mayores de la Secretaría de Extensión y Desarrollo de la UNRC. Las Jornadas se extenderán hasta este jueves y se llevan a cabo en el ámbito del proyecto “Adultos mayores hacia la construcción de nuevos imaginarios, encuentros intergeneracionales para consolidar el dialogo y solidaridad entre las distintas edades”,  proyecto premiado recientemente por la Fundación Navarro Viola.
Mercedes Gagneten presentó una charla taller en el aula mayor sobre “El PEAM en la complejidad de la universidad pública hoy. Contextos socio-políticos-culturales. Promoción de nuevos contextos”. Sobre universidad y  adultos mayores destacó la gratuidad del PEAM porque así debe serlo en una universidad pública, libre y gratuita, una gratuidad que actualmente, según lo agregó el público, incluye el Boleto educativo Gratuito, una gratuidad plena que se amplia al cuerpo docente y en general a la infraestructura necesaria para que el Programa siga adelante
Señaló que “esta universidad gratuita  además debe tener entre sus objetivos esenciales mejorar la calidad de vida de la gente y es fundamental el trabajo sobre la calidad de vida en adultos mayores. La Universidad debe aportar conocimientos y el Norte del PEAM es muy similar al de la Universidad pública: mejorar la calidad de vida de la sociedad. Y reiteró que no podemos quedarnos sólo en la teoría. “El PEAM es un programa que trabaja en el desarrollo de inteligencia  múltiples –dijo-  en el arte, en los idiomas, en la vida en la naturaleza, en la educación física, en el baile, no solo trabaja en la razón porque muchas veces la razón sola ha generado moustros. El PEAM es un proceso de educación continúa que va más allá de lo académico, es un programa que no se queda solo en la racionalidad”.
Mercedes Gagneten  tiene una vasta trayectoria en estudios sobre adultos mayores y desde siempre trabajó en el monitoreo y en la definición de estrategias del PEAM pese a que no venía a la ciudad desde 2006.  Con 68 años y 6 hijos, más otros tantos nietos entiende que la familia es un vínculo fundamental para la vida. “Es mi mejor presentación”, comentó, ya que antes de la charla fue presentada por la alumna del PEAM y docente durante muchos años de la Facultad de Ciencias Humanas, Alba Loyo, quien remarcó que la visitante es Licenciada en Trabajo Social, egresada en la Universidad Nacional de Entre Ríos, es magíster de Historia Latinoamericana de la Universidad Internacional de Andalucía y se doctoró en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Actualmente integra la Fundación EPyCA (Equipo de Producción y Construcción Alternativa) de Santa Fé.

Evaluación del Programa 
Gagneten sostuvo que básicamente la idea de las Jornadas era realizar una evaluación de cómo venía funcionando este programa de adultos mayores que lleva adelante la UNRC. Y subrayó como un hecho muy meritorio la estrategia de las unidades de gestión del Programa porque representan una forma muy práctica de abarcar diversas temáticas y a la vez de achicar la distancia entre universidad y sociedad. También destacó la importancia de evaluar al Programa: “Debemos siempre tener memoria para conocer como se dan y como se dieron los procesos porque no nacimos de un repollo. Al contrario hay que ir a los cimientos para evaluar toda la construcción del proyecto”.
“Las unidades de gestión  son las bases que permiten el hacer del programa, la acción y esto es el PEAM, la acción hacia la esperanza de una vida mejor. Consideramos esta práctica muy importante en diversos planos, no solo en el ámbito de los adultos mayores, porque ya en una apreciación de orden epistemológico, la práctica cotidiana es fundamental para la teoría, para la ciencia. Primero los pies luego la cabeza. La teoría nace de la práctica, la práctica es fundante de la teoría”.
Gagneten mantuvo un diálogo permanente con el público como interlocutor y participe activo con la modalidad de taller y basándose también en creaciones de Joan Manuel Serrat y Carlos Di Fulvio, entre otros artistas, destacó que  “el PEAM mediante sus distintas actividades recrea la memoria social, colectiva y promueve permanentes cambios en la relación intergeneracional. El adulto mayor llega a esta edad con miedos  pero también con pasiones que promueven las acciones canalizadas a través de las unidades de gestión,  Es una acción que mezcla la vida con las aulas”.
Expresó que “el PEAM implica contención a esos miedos y desarrolla las pasiones e implica aprendizajes e interacciones con sus pares y  por medio de vínculos intergeneracionales. Este Programa es una construcción colectiva que genera una revalorización del respeto para todas las generaciones, supone estar encaminado en los diferentes talleres, lo que nos hace personas activas que somos PEAM, tenemos una identidad con pasado presente y futuro”.


Acto de Apertura
La apertura se las Jornadas de Formación y Reflexión: mayores protagonizando educación y proyectos se concretó el martes en el Aula Mayor del Campus universitario con la presencia de autoridades, docentes, alumnos y miembros de Unidades de Gestión del PEAM. Fue presidido por el Rector de la  Marcelo Ruiz; quien estuvo acompañado en el estrado por el Secretario Académico-UNRC, Claudio Asaad; y los coordinadores del PEAM, Daniela Fuentes y Mauricio Boarini.
En el inicio del acto se presentó el Grupo de música “Los muchachos de antes”, conformado por alumnos del PEAM de la Unidad de Gestión Expresión Musical “Nagmen”  que interpretó los clásicos del cancionero popular Los setenta granaderos,  Paisaje de Catamarca y la tonadita cuyana Las dos puntas.   
El rector Marcelo Ruiz destacó la noción de la palabra compañerismo como concepto fundamental en la construcción de los sentidos comunes, que posibilita la construcción de horizontes comunes y horizontes utópicos. “En esta crítica a una sociedad que está organizada desde el poder, que separa ficcionalmente las generaciones, que impide los diálogos intergeneracionales y que reduce trabajo al empleo, cuando se habla de adultos mayores desde esta sociedad concebida desde algunos sectores del poder los adultos no serían partícipes de la sociedad de la producción. Este reduccionismo es brutal porque si nosotros concebimos el trabajo como el proceso continuo de transformación del mundo y de nosotros mismos y de las relaciones entre nosotros, entonces es un absurdo pensar que estar por fuera del empleo es cancelar la perspectiva de trabajo. El trabajo tiene una permanencia de toda la vida, desde el  nacimiento hasta la muerte.
Resaltó que “es importante destacar el proceso inacabado de autoconstrucción de nosotros mismos, no hay posibilidad de cerrar ninguna etapa porque la vida es proceso de transformación. Este punto de partida nos permite pensarnos en este diálogo intergeneracional. Hay que superar ciertos mitos de las imposibilidades de los diálogos intergeneracionales porque es la sociedad mercantil la que produce esta separación. No estoy negando las distintas etapas que vamos transitando en la vida”.
“Importante también marcar que nuestras sociedades cuando separan empleo y trabajo excluyen a amplios sectores de la población que ni siquiera tienen acceso al empleo. Hay que partir desde una perspectiva solidaria que implica poder ensanchar los márgenes de libertad y esto supone trabajar para poder superar los espacios de exclusión y pobreza”, explicó.
Luego  retomó palabras de Vicente Zito Lema cuando afirma que la calidad de una sociedad se mira en el trato que da esa sociedad a los niños y a los viejos. “Entonces una sociedad –expresó Ruiz-  que puede ubicar a ciertos sectores de la infancia en la explotación  y a ciertos sectores de la tercera edad en los geriátricos y en lugares de pobreza, no es una sociedad que pueda ser festejada sino que es una sociedad que debe ser superada. Por lo tanto,  apostamos a que la Universidad pueda colaborar en el proceso de expansión de la igualdad, en el reconocimiento del trabajo como proceso de transformación continua y en la superación de la ficción de las barreras intergeneracionales que produce la sociedad de la mercantilización”.

Daniela Fuentes
Daniela Fuentes destacó la importancia de establecer instancias de reflexión y formación para continuar fomentando la participación de los adultos mayores en distintos proyectos e iniciativas. Sostuvo que la apertura de estas Jornadas es un momento para festejar pues implica que estamos en marcha, nos sirve también para celebrar un premio de la Fundación Navarro Viola y nos sirve además para celebrar un nuevo comienzo porque todo nuevo proyecto es también un nuevo comienzo. Y es realmente muy importante que la ejecución de este proyecto comienza con unas Jornadas de formación y reflexión porque nos permite nos da una espacio para preguntarnos por los imaginarios. Es decir por aquellas definiciones sobre nosotros mismo y sobre el mundo en que vivimos que todos tenemos y a partir de las cuales realizamos nuestras prácticas cotidianas, que guían nuestras acciones e interacciones”.
 “Los imaginarios son una construcción social que no están desprendidos de la cosmovisión  del mundo social, ni de las condiciones materiales de existencia de cada sociedad. Los imaginarios en plural dependen unos de otros, se traman entre sí, a veces quedan acallados y son partes de una lucha social por el sentido y los que predominan en esa lucha constituyen a veces una realidad con tanta fuerza que nos hace olvidar su condición abierta, su posibilidad de renovación, de transformación pero también de reproducción”.
 “Desde el Programa se viene trabajando sobre los procesos de construcción de identidad y creemos que todavía hay que seguir profundizando ese trabajo, porque corremos siempre el riesgo de naturalizar las concepciones sociales sobre la edad, el bienestar, la madurez, los derechos, la ciudadanía, entre tantas otras cuestiones. Nuestra universidad pública tiene un compromiso con los derechos de los sectores más vulnerables y debe, necesariamente, reconstruir de manera permanente el debate”.
 “En este marco creemos que el proyecto –añadió- puede ser una forma más de reunir en ese diálogo a distintas personas de distintas edades y de distintos sectores sociales, para poner en cuestión aquello que sabemos de nosotros mismos y repreguntarnos qué queremos construir, sin renunciar a buscar una sociedad más justa. Es un momento de encuentro, para reflexionar y para pensar desde este lugar que nos es propio. Es el comienzo de un proceso que ojalá nos llene de sorpresas, porque lo que hay hacia adelante son disparadores de una construcción abierta e inacabada donde se propone un claro protagonismo por parte de los estudiantes del programa”.

Lucila Amaya
La profesora Lucila Amaya explicó que el proyecto “Adultos mayores hacia la construcción de nuevos imaginarios, encuentros intergeneracionales para consolidar el dialogo y solidaridad entre las distintas edades”  fue elaborado por los docentes del PEAM Susana Rocha, María Inés Bianco, Dario Busso, Enrique Alcoba y Marta Schlossberg. “Surgió a partir de una convocatoria de la Fundación Navarro Viola –detalló- donde se planteaban proyectos educativos para personas mayores como aprendientes y como enseñantes, lo cual nos pareció muy pertinente a la gente del PEAM. El objetivo de este proyecto es genera espacios socio-educativos de encuentros intergeneracionales, desde distintas edades poder trabajar junto en la construcción y transformación de los imaginarios. La idea es promover la solidaridad intergeneracional considerando las capacidades y saberes de la gente que está en el PEAM”.

Sara Carranza 
También hizo uso de la palabra Sara Carranza, alumna de la Unidad de Gestión Francés, donde participa de un grupo vocal que canta en francés. Recordó lo inicios de la Unidad de gestión cuando en un congreso de adultos mayores en Tucumán cantaron en francés Luna Tucumana. Tras lo cual relató las distintas actividades intergeneracionales que llevan adelante con el grupo. Así expresó que el grupo se presentó en la Escuela Infantil Rosario Vera Peñaloza, en el Centro Corazón de Banda Norte, en Buenos Aires en la embajada de Francia, en el Instituto Da Vinci cuando se jugó el mundial en Francia, entre otras instituciones. .  . 

Fuente: Prensa UNRC
Fotografía: Area de Fotografía - Dpto. Producción Audiovisual